:: Diario Rally ::

18/01/2025 - CAMPEONATOS DE RALLY RAID - CAMPEONATO MUNDIAL DE CROSS COUNTRY (W2RC)
1ra. ronda: 47° Dakar 2025- El día después: Protagonistas
Cuando la victoria en la Odisea se convierte en una historia de amor

Novios desde niños, marido y mujer, hoy, los cordobeses Nicolás Cavigliasso y Valentina Pertegarini hicieron realidad el sueño de ganar el Dakar juntos, uno de los desafío más extremos del mundo del motor. Nicolás Cavigliasso y Valentina Pertegarini se impusieron en la división Challenger del Dakar 2025 Arabia Saudita, la segunda de FIA, cerrando hoy en la Etapa 12 -Shubaytah/Shubaytah- una inobjetable actuación con su pequeño Taurus, en la carrera más difícil del mundo.

Su 11° puesto en el especial de 62 Kms. que cerró la competencia es anecdótico, porque su primer puesto en la general fue indiscutible desde el final de la primera semana y se consolidó todavía más ayer cuando su más cercano perseguidor, Gonzalo Guerreiro quedó a más de una hora de diferencia.

Nico suma su segunda victoria de Dakar, ya había conseguido una como piloto de cuatriciclos -en 2019-, por entonces, Valentina -su novia desde la niñez- ya formaba parte de su equipo y le marcaba los colores de los peligros en las hojas de ruta, aún de papel.

Fue aquella vez, cuando Nico le pidió que lo acompañe al podio. Donde tras recibir su 'Touareg', se sacó el anillo del bolsillo, se arrodilló y le pidió casamiento con la TV en directo para todo el mundo. No podía ser más emocionante y sentimental.

Cuando el Dakar se mudó a Medio Oriente, él lo intentó de nuevo con su 'cuatri' y venía ganando cuando rompió el motor en la Etapa 7. Dos años más tarde, se subió a un UTV y la invitó a ser su navegante. La primera experiencia con un T4 no fue muy fructífera, pero Nico y Vale comenzaron allí un camino que no se detendría.

Bien aconsejados, dejaron la T4 y se subieron a la T3 con un Taurus, para ser segundos en el 'Desafío Ruta 40', en nuestro país. Era su preparación para el Dakar, al que llegaron en muy buena forma, pero un problema con el embrague los relegó al 9° puesto, cuando habían ganado dos etapas y peleaban por el podio.

La decisión de ir por más, usando el W2RC como base para la preparación, donde resultaron, él sub-campeón y ella, la primera mujer campeona mundial FIA de la historia, los trajo en el mejor momento de forma a disputar el triunfo en la categoría más competitiva de todas, con 53 máquinas como las suyas.

Un comienzo espectacular, los puso primeros desde la primera etapa. Ganaron la 1, la 3 y la 4, para terminar la semana inicial con más de 28' minutos de ventaja con Gonzalo Guerreiro. De allí, en más, trabajaron para administrar esa diferencia, cuidando el coche de cualquier riesgo, vieron como su perseguidor perdía una hora por forzar la marcha en el penúltimo día y largaron la especial final de solo 62 kms. con más de una hora de ventaja.

Se dedicaron solo a disfrutarla y las lágrimas comenzaron a correrles por los ojos, sin llamarlas, cuando el Taurus #301 entró en los cuatro kilómetros finales y la emoción le ganó a la velocidad porque ya nada les detendría.

Se había cumplido ese sueño que nació con dos jóvenes protagonizando uno de los proyectos más serios de nuestro mundo motor de la última década. Ejecutado con el más alto profesionalismo que se pueda pedir para un escenario tope de competición. Sostenido con la máxima determinación que el tremendo esfuerzo de la carrera más difícil del mundo exigió. Potenciado, como ningún otro, por la fuerza de un gran amor.

Fuente: cadena3.Motor